septiembre 06, 2010

POR AMOR A LAS LETRAS


Antes de comenzar, déjenme decirles lo improvizado de esta entrada, pues he estado leyendo la reforma educativa mexicana (una vergüenza por cierto) para comentar al respecto, sin embargo, hoy en horas de vigilia y soliloquio, me he visto en la imperante necesidad de compartirles lo siguiente:

Vaya que es muy difícil tomar decisiones, sobre todo, cuando aparentemente  de tales, depende el resto de tu vida productiva. Uno quisiera tener mente de brujo en ciertos momentos, para intentar adivinar lo que en un futuro podría suceder. Lo cierto es que, eso, por lo menos en la inmensa mayoría, es una virtud ausente.
Ha ya tanto tiempo, que me cuestionado incansablemente sobre el qué hacer, y hoy, me hallo empleando mis horas en una inversión educativa donde al parecer, debo aprender enseñando; bastante paradójico pero muy cierto, sin embargo, no me visualizo pasando el resto de mi vida dando clases. Es por ello, este texto que hoy escribo fuera de lo común; viendo a mi alrededor y observando lo bello que puede ser todo... cuando se le sabe hallar lo bello. 
Alguien dijo por ahi: "No es grande el que siempre triunfa, sino el que jamás se desalienta"... pienso ser de los que no pierden la esperanza, y por todo lo bello que he visto, en las letras y en cada libro, aunque bastante ignorante me he convertido (¡qué importa!), siempre habrá un motivo... Por ello, sin mucho qué decir, y con una tremenda carencia redactora por la pérdida de la costumbre, quiero brindarle mi más respetuoso reconocimiento, a aquello que hasta hoy, he conocido como el mayor galardón del hombre: Las Letras. Signos gráficos que siempre habrán de saber lo suficiente, para educar hasta el más vil grado de ignorancia. Debido a esto, elogiando la sutil virtud que las mismas poseen, ¡Hoy me ofrezco a su entera disposición!... para serles un fiel servidor.


SOLILOQUIO:
¡Oh 2010!... ¡Cómo me has martirizado!... Tuviste qué llevarte primero a Saramago, y ahora te llevas a Germán Dehesa... ¡Oh Dios si escucháis en algún lugar, tén misericordia, que la gente que realmente vale la pena, se nos va de entre nosotros; y los que manipulan a la razón, cada vez son más!...

  



"¡...Para mí la lectura no es una obligación, es un placer!" 
 Pensamiento de G. Dehesa expresado por él en un programa de TV.






A mi estimado y entrañable Germán Dehesa (Aunque jamás le conocí), un crítico y enorme analista de nuestro México, le comparto a donde quiera que esté, mis palabras; entendiendo la falta que hará para un México como el de hoy. Q.E.P.D. (1944-2010).


Gilberto Esteban Gómez Lara.



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1 comentario:

Caro Reyes dijo...

ME ENCANTA COMO ESCRIBES GIL...FELICIDADES HERMANO LETRADO ;) El señoron (en toda la extension de la palabra) German Dehesa lamento haber conocido sus textos desps de su partida. Gil no se si ya leíste "Una rosa para el Maestro" de este magnifico ser, que Dios brindó a la sociedad; si no lo has hecho, te la recomienda ;) sigue con el Soliloquio eeh.. soy tu fan! Carolina Reyes