febrero 28, 2011

Desambiguación




Un buen día mi padre reflexivo y certero me dijo mirándome a la cara: "Hay más tiempo que vida"
Yo sonreí y sin embargo no entendí del todo.
Es cierto que el tiempo se nos va y no nos alcanza, bueno sí que nos alcanza y cuando esto pasa solemos llamarle muerte, así que será mejor sustituir esa palabra, el tiempo no nos rinde. A los humanos no nos son suficientes 24 horas al día, ni 158 a la semana y mucho menos 8765 horas al año, el tiempo no nos satisface, o no nos satisfacemos.
El problema siempre va a ser el tiempo, Que si esto o lo otro: no me dio tiempo. Que si tú o yo: necesitamos tiempo. Que si arriba o abajo: es cuestión de tiempo. ¡Alguien podría entonces presentarme a ese famoso Tiempo! Todo depende de esa divinidad omnipresente que los griegos de la mitología llamaron Chronos y los titanes y humanos Crono, parientes, súbditos o jefes, tienen o tenían el poder de hacer y deshacer a su antojo, de jugar con su tiempo y el nuestro.
Pues ese famoso tiempo es el que gobierna y se apropia de cada uno de nuestros pasos y nuestras acciones, no nosotros, sino El Señor Tiempo.
Entonces, después de aquella frase, aquella sonrisa y aquella charla con mi padre, empecé a pensar en el tiempo, pero no en cuánto tiempo, sino en el cómo, cómo agrandarlo, acortarlo, subirlo o bajarlo, cómo invertirlo y hasta revertirlo, pero después de tanto tiempo de pensar en el tiempo, sólo se me ocurrió una única cosa: El tiempo no me va a dar, el tiempo se me va a ir, por eso ahora ya no pienso qué hacer con mi tiempo, sino qué hacer con mi vida...








IMPRESIONANTE






IMPRESIONANTE



TU TE PREOCUPAS POR MANDAR CORREOS CADENA POR MUCHAS CAUSAS:


LA MATANZA DE FOCAS...


QUE CERRARAN HOTMAIL...


LA LIBERACIÓN FEMENINA

HOROSCOPOS ...

¿¿¿Y QUE CONSEGUIMOS???

Realmente: NADA.

Solo llenar mutuamente nuestras bandejas, perder tiempo valioso, tiempo que de por si no es nuestro y que podriamos ocupar en otras cosas. cosas como ver crecer a nuestras nuevas generaciones, instruirles y encaminarles a un futuro mejor...


Enseñarles lo importante que es compartir, y como muestra regalarles un poco de nuestro tiempo.
¿te has preguntado cuando fue la ultima vez que pasaste con tus hijos, (hermanos, sobrinos... familia en general) un día entero solopara ellos? cuando menos una hora sin interrupciones de la oficina, ni preocupaciones menos mundanas...

¿cómo tenemos tiempo para leer, reenviar y recomendar textos vacuos y no tenemos para hacerle una llamada a nuestra madre que no nos ve porque estudiamos lejos?

La familia es la base de la sociedad mexicana y a pesar de ello en el año 2005 se registraron 70 mil 184 divorcios, en el 2006 72 mil 396 y para 2007 la cifra es de 77 mil 255. En 1970, por cada 100 matrimonios hay tres divorcios; en el 2003, esta cifra se eleva a 11 divorcios y para 2008 hay 14 divorcios por cada 100 matrimonios*. Reflejando con ella las bases poco sólidas que existen en nuestra sociedad actual, problema causada quizas por imitación de culturas ya que son las entidades del norte las que tienen estos numeros en rojo.

Les invitó a que este tiempo de reflexión los lleve al anális y mejora de su propia vida, sin importar si están de acuerdo o no con las palabras de esta servidora, y más que preocuparse los aliento a ocuparse de todo ello. No cometamos los errores que cometieron nuestros padres, seamos piso sólido para el futuro de aquellos que aun no han nacido.

Sin más que decir y deseandoles un feliz inicio de semana, y esperando como siempre sus comentarios me despido de ustedes esperando que estas palabras sean de provecho para ustedes.

Victoria Del Val


febrero 15, 2011

Palabras y más palabras



Palabras y más palabras

"Memoria: juego de la imaginación, cuento de juglar, ensueño de un pasado que vivió otra persona a quien crees conocer, pero que ya no existe"
Rosa Montero, Historia del Rey Transparente.


Memoria, algo que como muchas otras situaciones nos han hecho creer, guardar, asimilar de un modo absurdo. Memorizar. La verdad de todo jamás la sabremos, ¡Has memoria! te dicen, pero no puedo porque mi memoria no es mía, y tampoco puedo crearla.
Creer o crear, diferencias nula entre la mente y el corazón, entre un pensamiento y la verdadera razón, creo y creo ¿Cuál es la diferencia? "Creo en Dios" y "Dios te creo a ti", sí tú no crees en Dios, él no te pudo haber creado, ¿o sí?, ¿Él existe?, se me figura como un juego de palabras, algo como para endulzarte el oído, Dios es una invención creada por el hombre para tener algo en que creer, para tener algo, poco, no mucho, sólo algo que ni es nuestro ni sabemos de donde salió, para tener algo en la memoria.
Nada existe, ni ellos con las risas falsas, ni los otros con sus palabras prometedoras, nada existe, ni este sueño parecido a la vida. Mentira. Es mentira eso de la vida. Es mentira ese creador, son mentira sus creaciones, mi padre mi madre, mi hermano y yo.
Crear para creer. Memorizar para olvidar. Mentir para vivir. ¿Qué es lo que existe en realidad? Todo es una simple falacia creada y creída que se nos ha olvidado olvidar, una mentira más hecha por los políticos, el pueblo o la religión. ¿Hasta cuando seguiremos confiando y creyendo?, ¿Hasta cuando seguiremos memorizando letras y números casi inservibles para nuestras mentes?...
Son sólo unas palabras inexistentes, una mentira creada para vivir.








febrero 05, 2011

CULTURA TABÚSOLILOQUIO



LAS DUDAS DEL PREDICADOR




Enmienda tú, arcángel San Miguel, apóstol de las intercesiones sin lisonjas, enmienda tú a estos naturales y nativos, y extírpales las influencias perversas, y el ánimo de transformar los templos en tianguis indecentes, y borra de ellos las supersticiones, y elimina con ira a sus falsos reyes, sus abominaciones y blasfemias, sus monstruos que parecen ancianos a los catorece meses, y sus iguanas que hablan con las reliquias como si éstas tuvieran don de lenguas.
Varón inmaculado, santo arcángel, castiga a los nativos, cortos de manos y restringidos de piernas, quebrantados y confusos. Haz que sepan de tu aborrecimiento y tu justicia. Que sus arroyos se tornen polvo abyecto, sus perros amanezcan desdentados, su falsa mansedumbre se vuelva azufre y sus cánticos sean peces ardientes sobre su miseria. Pasa sobre sus dioses escondidos cordel de destrucción y que el vientre de las indias mudas aniden humo y asolamiento.
Porque, enviado con alas, este tu siervo ha vivido entre nativos muchos años, exhortando a quienes no quieren distinguir ya entre la verdadera religión y las idolatrías nauseabundas, entre el pecado y el respeto a la ley. Castígalos, Miguel, y devuélveme mi recto entendimiento, para que ya no sufra, y abandone los tenebrosos cultos de medianoche y nunca más le ruegue, pleno de confusión y de locura, a Tonantzin, Nuestra Madre... de la que inútilmente abominan los hombres barbados que con espada y fuego instalaron sus dioses en nuestros altares creyendo, pobres tontos, que hemos de abandonarla algún día, a ella, nuestra diosa de la falda de serpientes. 
 

Carlos Monsiváis. 
"Nuevo catecismo para indios remisos";
1982.  



febrero 03, 2011

Raspas de a 10


¡Raspados!, ¡raspados!, -me acerque al señor de cabeza cana, cubierta por un sombrero de paja que evitaba al socarrón sol. Su voz me abrió el apetito, el bochorno que me provocaba el típico clima de la ciudad me incitó a precipitarme hacia él. Observé minuciosamente su carreta roja, envidiando la frescura del hielo y de los frascos con jarabe a sus costados.


-¿que va a llevar niña? -de pronto me transporté a las fechas en que yo era una pequeña, me imaginé con trenzas bajo el cielo de marzo corriendo desbocadamente, como todos mis vecinitos, para alcanzar al señor de las raspas. Fue necesario despejar con la mano la nube de recuerdos que revoloteaban por mi mente para poder contestarle: -quiero uno de durazo porfavor. -¡mi favorito!-.
Raspó con calma su hielo, el vaso sudó desde el primer momento en el que puso la masa helada molida, colocó la mitad de un escualido durazno y vació con tiento un poco de jarabe. Mientras estiraba la mano para acercarme el raspado, sonriendo agradablemente me dijo: -son diez pesos.
Rebusqué con fiereza en mi bolsillo, temerosa de no contar con suficiente cambio, al fin logré ajustar los diez pesos.
El señor recibió su dinero y se encaminó con su voz jocosa presumiendo sus raspados. Y ahi me quedé yo, con mi cara de boba, con mi raspa de pàlido amarillo, que lo unico que tenia de durazno era el color. Sorbí con tristeza mi raspado mientras caminaba ensoñada en mi pasado.

No cabe duda que la vida, hoy por hoy, resulta muy cara. Unos años atrás las raspas eran de a cinco, con mucho jarabe y duraznos que daban gusto ver, hoy el dinero no alcanza, ni para comprar cosas caras, no se diga para vender más barato. Y es que comienzo a estar en desacuerdo de que culpen al gobierno por ello, que digan que la culpa la tiene Slim, porque él se queda con millones de dolares cada año, y no. Señores, aqui los únicos culpables somos nosotros, los que no reclamamos, los que olvidamos que Democracia significa originalmente "El Gobierno del Pueblo" totalmente simétrico a la era de "El pueblo del GOBIERNO" que al parecer estamos viviendo.
¡Alzemos la voz sin gritar!, hablemos sin preocuparnos de lo que piense el vecino, porque en el fondo, ¡nuestro vecino piensa igual pero tiene miedo de decirlo! ¿Porqué lo afirmó? Por la sencilla razón de que a pesar de la maldad, todos queremos lo mejor para nuestras generaciones futuras. Asi que no dejen su presente ni su futuro en manos de nadie más que ustedes, y no se preocupen del pasado, ese ya no tiene cabida en el "hoy".

Se aceptan todo tipo de comentarios, recuerden que nuestro único fin es alimentar la conciencia de las mentes.

Victoria Del Val

**nota: Al referirme que: "el pasado no tiene cabida en el hoy" es estrictamente a nuestras acciones, no ha olvidar nuestra historia que es la base de nuestro desarrollo. Sin embargo considero necesario en pensar que podemos hacer hoy y no en que pudimos haber ello, teniendo como precedente todo lo que México ha vivido desde su fundación.

¿Hemos olvidado lo que teníamos?

Me gusta caminar. Desde hace muchos años, es parte de mis rutinas de esparcimiento. Por lo común, recorro una hora y media, o algo así. Aunque últimamente, las responsabilidades me limitan a trayectos constantes.

El andar a pie te permite que aprecies los rostros de las personas, sus gestos, preocupaciones; que veas que, aunque todo parezca igual, siempre aparezca un nuevo detalle, alguno que no habías observado antes. Un detalle escondido en tu punto ciego.

Antier, precisamente, pasé por una calle en la que (al menos eso creo) jamás había transitado. Al parecer, la 1a poniente entre 8a y 12a norte. Me sentí por un rato como un visitante en una ciudad antigua.

Y, sin lugar a dudas, hay casas que nos remontan años atrás. A los años de las tejas, de las paredes de adobe, de las persianas de madera. Casas que nos hacen imaginar un Tapachula más tradicional. Sin autoservicios en cada esquina.

No estoy en contra del desarrollo de la ciudad. Pero cambiar por cambiar no tiene sentido. Hay cosas que constituyen parte del patrimonio histórico de Soconusco. Y, con ello, quisiera referirme a la evidente destrucción de muchos edificios añejos en el primer cuadro de la ciudad. Ya hubieron quejas, ya se construyeron otras cosas... en fin. No ahondaré en ello.

Pero el patrimonio, ustedes estarán de acuerdo seguramente, no lo constituyen solamente los bienes materiales. Recordemos las historias de los abuelos. Concretamente, las de los ríos. ¿No son acaso parte de la riqueza natural de nuestra región? Un río no es una corriente de agua sobre la cual se pueden verter desechos. Es algo más. No debe ser el sacrificio de una mala planeación urbana.

Recientemente la SEMARNAT llevó a cabo estudios y se detectó que ya hemos rebasado los estándares de contaminación en ríos y mares. ¿No es ya alarmante que requerimos una inversión en estos rubros? ¿Es necesario que se tengan que cerrar las playas o una alerta roja en infecciones por los patógenos en ellas? Dime, joven lector.

A propósito, cada vez que en la primaria cruzaba el puente del río Tescuyuapan, no podía creer cómo es que de pronto veía garzas en ese lugar y me preguntaba si se habrían acostumbrado. Y hoy, me preocupa que los habitantes nos hayamos acostumbrado tanto a ver (incluso vivir) tales escenarios y que los esfuerzos por atender cultura, sociedad y ambiente sean contados (y muchas veces, ignorados). Y no quiero pensar que esto vaya para un largo rato. Que no vivamos una conciencia comunitaria y nos encerremos en el egocentrismo y el hedonismo, mundialmente, en boga.

Quiero aterrizar en las siguientes preguntas: ¿nos hemos olvidado de lo que teníamos? ¿hemos volteado la mirada hacia nuestras calles y ríos? ¿nos hemos vuelto tan soberbios como para olvidar nuestras raíces e ignorar nuestros paisajes?

No sé ustedes, pero prefiero gastar 30 pesos de pasaje y estar cerca del volcán que pagar 300 pesos por unas horas frente a un artista. Es una mejor inversión, ¿no?.

febrero 02, 2011

2 de febrero y corriendo





Disfrutaba de una deliciosa taza de chocolate y me di cuenta, mis ojos desmesurados se enfocaron sobre la pequeña cabecita que se habría paso entre la esponjosa masa que lo recubría…

Vaya sorpresa, ¡un niño frente a mis ojos! con los ojitos cerrados y tan blanco como la leche. Aún no terminaba de pasar mi asombro, cuando atragantándome con mí espumosa taza caliente noté un punto blanco justo a su lado: ¡otro pequeñito!
-¿Es qué esto nunca acaba? –pregunte adormilada, mientras los demás volteaban a verme y rompían a reír a coro por mis ocurrencias.
Así es amigos, de la mini-ligth-rebanada de Rosca de reyes que dispuse, salieron dos muñequitos, ¡dos! y hoy, por supuesto, yo pago los tamales… bueno, no realmente, la verdad es que me tocó poner la música, ya que lamentablemente esta tradición que data desde la época de la conquista se ha ido deteriorando con el paso de los años.
Esta celebración indica la presentación del niño Jesús al templo después de los 40 días de nacido, marcando con esto, el término de la navidad. Coincidentemente, en México se celebraba por estas fechas un rito similar, según se narra en los escritos del fraile Bernardino de Sahagún, en el que nuestros antepasados rendían culto a los dioses con tamales y atol, para pedir por lluvias fertilizantes y cultivos abundantes. Con la conquista estas costumbres se fusionaron y trajeron consigo lo que hoy conocemos como “el día de la candelaria”. Recibiendo este nombre derivado de la palabra “candela” ya que hace referencia a Jesús como la Luz del mundo. En la comunidad católica, se ha adjudicado la aparición de una virgen en las islas Canarias como patrona de estas fiestas y se le festeja también a ella pidiendo los habitantes de estas islas por el clima en sus tierras.
Pese a todos los antecedentes, la historia que ha hecho de estas festividades una tradición mundialmente conocida, se ha ido deteriorando, si bien aún se marca en el calendario, es conocimiento de muchos que esta se utiliza como un pretexto para una convivencia social , dejando de lado los valores y principios que justificaron su existencia. Gran ejemplo de ello es que ya podemos celebrar este día ¡en cualquier antro de nuestra ciudad! Siendo originalmente para la tradición católica y para muchas religiones una fiesta de guardar.
No es anormal que nuestro ritmo de vida y nuevas adopciones culturales modifiquen drásticamente nuestras tradiciones, sin embargo, en mi particular opinión, considero que hay cosas por las que se debería guardar respeto. Que este día sea un recordatorio de la Luz que falta en nuestras vidas, que celebremos, ¡si!, ¡por supuesto!, pero unidos, con las personas que amamos derrochando amor y armonía propagando esa Luz en nuestros corazones, no rodeados de completos extraños al ritmo del bum bum y totalmente embriagados (cosa que aclaro, no es de mi incumbencia, podemos hacerlo estoy de acuerdo, es nuestra vida, pero no usemos de pretexto estas festividades es como restarle credibilidad en este mundo de por sí ya insano).
Cierro este día tan sólo con una felicitación e invitándoles a que reflexionen, no sobre esta nota específicamente, pero si sobre la vida, que analicen y que actúen. Recuerden que este espacio es suyo y la retroalimentación nos permite crecer. Un fuerte saludo y un beso.
Victoria Del Val.